Sunday, April 16, 2006

V






Veamos...

vivaz venganza venerada por un vigoroso público;
viable plan que termina volteando la voluntad de varios;
vendetta velada por un valeroso vate;
verborrea vociferada como vaticinio;
vacuna contra el veneno de un victimario gobierno;
valor y veracidad versada por un violento antihéroe;
violencia voraz que vomita votos a favor de la vox populi;
vociferación vasta de vicisitudes vanguardistas;
veto de un totalitarismo vicioso y vil para dar lugar a un virgen régimen voluntario;
válida apuesta por un vástago producto de voces villanas;
vilipendio de la vida humana;
vindicación de un sujeto socialmente vacío;
visita vital del Verbo en..mascarado;
¡viva! la volatilidad;
voltaje necesario para volar la veda gubernamental;
“v”elleza que vulnera la viril violencia;
visible caída de la vigente regulación;
victoria vertida sobre la voz del pueblo;
v....

La verdad es que verla provoca vehemencia
(V)uena y (V)rillante


Wednesday, April 12, 2006

Viene...

Fugaz


Queridos bloggernautas.
Los he dejado botados por un tiempo ya sea por flojera o por la adaptación que he tenido que hacer a la nueva carrera que curso. Sin entrar en detalles de mi vida privada quiero empezar las críticas 06 con un estreno criollo: la "Fuga" de Pablo Larraín.
Fui a ver Fuga con las mismas expectativas con las que fui a ver Se Arrienda (tratándose de películas muy distintas). Me interesaba experimentar nuevamente la sensación de un cine de calidad, de una obra emocionante que diera que hablar entre los amigos, que se nombrara en los carretes con un "¿Viste Fuga?....es increíble". Todavía no pasa y no creo que ocurra. Fuga se "fuga" de la cabeza en pocos días.
Si bien la cinta me mantuvo con los ojos pegados a la pantalla durante la totalidad de su metraje, cuando salí de la funcíón comencé a reflexionar sobre lo que recientemente había visto; un filme de excepcional técnica, agradable a la vista y ,particularmente, al oído, pero que flojeaba a ratos en su contenido.
Jorge Morales, crítico del sitio Mabuse.cl, le apuntó precisamente a mi punto de vista: la película trata de un extraño músico que es perseguido - a voluntad - por una melodía denominada "Sinfonía Macabra" (que está muy buena) cuyos acordes le hacen zozobrar de la realidad, pero que aparentemente - el músico - carece de una génesis musical, de una causa de su melomanía. Sin esta base temática no podemos llegar a sentir esa pasión desenfrenada que Eliseo Montalbán pretende hacernos llegar; esa orquesta musical que Eliseo lleva en su cabeza no es más que una mera justificación de la carencia argumental de Fuga.
Admito que me siento frustrado por no poder interpretar un instrumento a cabalidad, pero no por eso desconozco la interioridad que trae consigo una nota musical. La "fuga" de Montalbán no se explica, mejor dicho, se fuga. La película denota calidad visual mostrándonos imágenes frías y oscuras, mientras su ambición (y la de su director) se agranda cada vez más hasta llegar a un final abierto que deja con sabor a poco.
Las actuaciones son aprobables - no soberbias - principalmente la de Alfredo Castro quien, como muchos lo han dicho, después de tanto delirio lleva a un momento de relajo al espectador (semejante a la situación del blow job entre los dos disfrazados en El Resplandor de Kubrick).
Sin embargo, y a pesar de la dura crítica que le hago, destaco el valor de Pablo Larraín de atreverse a filmar con una decena de fondos privados una película que a pesar de sus fallas procedentes de un novato, genera el cierto rumor de boca en boca de que en Chile se están haciendo cintas distintas y exportables.