Thursday, February 26, 2009

Cha Cha Cha


A veces ruda, de momentos cursi, esta es una historia que raya en el cliché del pobre que de un día para otro se convierte en rico, pero que no cae en el completo estereotipo por el consumado talento de sus protagonistas. Luna y Garcia invierten sus roles de "Y tu mamá también" con un resultado que los confirma como la dupla latina del momento.
Entretenida.


Trailer

Wednesday, February 25, 2009

La historia sumergida

Un ejemplo de historia bien contada. Realizado por un japonés, con título francés, cuenta la aventura de un solitario anciano que extravía su pipa y en su busca se sumerge en recuerdos de un pasado que poco a poco ha ido cimentando bajo el mar.
Un excelente y emotivo trabajo en que el polvo que cubre los recuerdos es reemplazado por burbujas.

La Maison en Petits Cubes (2008)
Premio de la Academia al Mejor Cortometraje Animado
contenido removido

Y los demás candidatos fueron:

Lavatory Lovestory by Konstantin Bronzit (Rusia)

Oktapodi by Julien Bocabeille and François-Xavier Chanioux (France)

Presto by Doug Sweetland (USA)

This Way Up by Adam Foulkes & Alan Smith (England)

Tuesday, February 24, 2009

Desvío (¡Cine sin salida!)


Todavía con la resaca de los premios Oscar me queda espacio para seguir reflexionando sobre los ganadores. Slumdog Millionaire fue la indiscutida triunfadora (y la más obvia). Todos los galardones fueron absolutamente predecibles, salvo Penélope Cruz, Sean Penn y Departures (Okuribito, 2008), película japonesa que ganó en la categoría Mejor Filme Extranjero.
Pero a pesar de tales excepciones, mi opinión es que la premiación está girando hacia rutas equívocas. Desde hace algunas temporadas los premios del tío Oscar ya no tienen el suspenso de antes, que los hacía anfitriones de grandes cintas que a veces pasaban desapercibidas por el público general. Ahora es muy fácil tener todas las nominadas a la mano (comprándolas en la cuneta o bajándolas), verlas antes de la ceremonia y apostar por las ganadoras. Sin duda es un proceso paradisíaco para cualquier cinéfilo, y no hay nada que satisfaga más el ego durante esta estación que estar al día con las nominadas al premio Oscar. Con todo, estar actualizado en lo que a cine hollywoodense se refiere también trae sus contras. El principal es que se deja de ver cine al azar. La libertad plena de hacer zapping en el cable y encontrarse con un bodrio o con una joyita es una experiencia que se deja de lado en período de premiaciones.

El fin de semana pasado me topé en el canal AXN con dos bodrios (uno bueno y otro malo) que me liberaron de la fiebre de especulaciones alrededor de los oscar. Wrong Turn (Camino hacia el terror, 2003), y su secuela hecha para televisión, Wrong Turn 2: Dead End (2007). Fue un alivio verlas desligado de expectativas. Por supuesto que no esperaba dos obras maestras, tan sólo exigía un poco de libertad cinéfila.


Tal vez eso le falta a los premios oscar, libertad, más licencias. Desviarse de la ruta a veces hace bien. Sino pregúntenle a este grupo de adolescentes quienes caen (¡dos veces!) en manos de caníbales frekis.




Camino hacia el terror (Wrong Turn) (Escenas rescatables)